lunes, 30 de abril de 2012

Domingo.



Otro domingo que se va.
Por la mañana, feria de San Telmo.
Colores, olores, sabores y entre medio de tanta gente aquella marioneta y nunca sabré quién manejaba a quién.
Tango for-export por todos lados y yo pensando que si la Tita viviera... seguramente los echaría del templo, cagándolos a latigazos.
Chorizo al pan y la alemana que faltó a la cita.
Mejor así.
Vos y yo perdiéndonos entre la multitud, caminando del brazo y con el silencio de las almitas cómplices.
Por la callecita venía la comparsa... con porta-estandarte, porta-bandera, bailarinas y atrás la cuerda de tambores.
Todo ganas, metiendo y metiendo... aunque sonaran poquito.

Ahora ya la noche se hace madrugada. 
Apuro el último mate y pronto comenzaré con el ritual de esperarte con los vasos prontos... llenitos de hielo.
Es buena hora para escuchar a Ney Matogrosso y aquella canción llamada "Poema", donde todo se une y todo me puede.
La letra de Cazuza, la voz de Ney...
Tanta cosa mueve la voz y la sensibilidad de Ney Matogrosso.
Está viejo el Ney... y claro!
No solo yo cumplo años...
Y a mí, me sigue conmoviendo.



"Poema" (Cazuza / Frejat)

Hoy tuve una pesadilla y me levanté atento, a tiempo.
Me desperté con miedo y busqué en la oscuridad
alguien con tu cariño.
Recordé aquel tiempo
Porque el pasado me trae recuerdos
del tiempo en que era niño
y el miedo era motivo para llorar
y era disculpa para un abrazo o un consuelo.
Hoy, me desperté con miedo pero no lloré
ni pedí cobijo.
En la oscuridad veía un infinito sin presente,
pasado ni futuro.
Sentí un abrazo fuerte, ya no era miedo.
Era una cosa tuya que se quedó en mí.
De repente vemos que perdemos
o que estamos perdiendo alguna cosa
sin gracia, ingenua, que se va quedando por el camino
que es oscuro y frío pero también bonito
porque está iluminado por la belleza
de lo que ocurrió unos minutos atrás.

1 comentario:

Rossina dijo...

Disculpe que se lo diga sin vaivenes, no hay como un domingo en Tristán...
si estuvo en el bar plaza Dorrego imagino que reparó en la legendaria foto.
de todos modos, amamos San Telmo...