viernes, 25 de junio de 2021

La Vida.

 Fue una de las primeras veces en las que me había quedado a pasar la noche junto a Elena en la corrala en la que vivía en el barrio de Lavapiés. No recuerdo bien pero al otro día ella tenía que marcharse temprano a su clase de flamenco y yo me quedé un rato más en su casa. Me había quedado retumbando algo que me dijo Elena… “playas con chozas de coral”. Me parecía tan bonita esa imagen… cuando de pronto y aún no sé el por qué, se me apareció otra imagen, la de mi hija Tamara mientras íbamos en la vieja Ford desde Atlanta hasta Nueva York. Recuerdo bien ese momento. Yo iba pensando en si estábamos haciendo bien en dejar EE.UU e irnos a vivir a España. Estábamos cruzando la frontera entre Carolina del Norte y Virginia. La carretera era una enorme recta y todos dormían. Cuando de repente miré por el espejo retrovisor y noté que Tamara estaba despierta haciéndome la V de la victoria con sus deditos. Ahí fue cuando aceleré la Ford a fondo… De aquel papá todo va a estar bien a las playas con chozas de coral. Tamara y Elena, dos de mis más grandes amores, reunidas en este vídeo.