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| El número 8 de la Calle Libertad... |
"Nada me detuvo.
Me liberé y me fui.
Hacia placeres que estaban como
en mi ser,
a través de la noche iluminada.
Y bebí un vino fuerte,
como solo los audaces
beben el placer."
Konstantino Kavafis
(extraído de la contratapa del menú del Libertad 8,
mientras esperaba turno para entrar al baño...)
...
8 comentarios:
ES UNA MARAVILLA
Y UTILIZAR NUESTRO TIEMPO MUERTO EN ENCONTRARSE CON SEMEJANTE ESCRITO ES AÚN MÁS MERITORIO
LOS MENSAJES, CUANDO DECIDEN LLEGAR A NOSOTROS, NOS SORPRENDEN EN CUALQUIER LADO
SALUDOS
Tengo por aquí la antología de Kavafis y ese placer, inserto en la carta, me parece el plato apropiado para devorar durante la semana. Curiosamente, el otro día en el aeropuerto, vertí el azúcar en mi café con leche y advertí que el sobre de azúcar llevaba inscrito: "A los soñadores se les puede matar; a los sueños jamás" (o algo parecido). Y me pareció genial, lo más apropiado para beber mientras esperas ser catapultado por los aires...
¡Un fuerte abrazo, Gato! :)
¡que grande!
y no será allí, por ejemplo, donde el lobo aquel de la estepa se metió una noche para no salir jamás, bajo el cartel de 'sólo para locos..' ??
(je, la imagen de esa entrada me trajo a esa imagen, que se ve era parecida a la que yo guardaba en mi cabeza, inventada, claro está..)
se agradece lo compartido. en qué ciudad me encuentro a libertad 8? quizás pase por allí a tomar esa copa de vino
Escribiresseducir... Lo bueno es que además de llegar, sepamos ver esos mensajes. Saludos!
Diebelz! Alegría de leerte... Y sí, es buena cosa comer poesía o utilizarla como azúcar para el café. Me alegra saber de vos.
Un abrazo enorme!
magdalena!
También me alegra leerte!
Cuando quieras venir por Madrid, allí en el Nro.8 de la calle Libertad está ese boliche de la foto. El vino lo pago yo.
Y éste, en la misma sintonía no?
VUELVE
Vuelve a menudo y tómame,
amada sensación, vuelve y tómame -
cuando del cuerpo la memoria se despierta,
y un antiguo deseo vuelve a pasar por la sangre;
cuando los labios y la piel recuerdan
y las manos sienten como que tocan otra vez.
Vuelve a menudo y tómame en la noche,
cuando los labios y la piel recuerdan...
Ana...
Totalmente, la misma sintonía.
Joder con el Kavafis, no?
Un abrazo!
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