domingo, 12 de julio de 2009

Pablo Neruda... ese amigo del alma.



SAUDADE

Saudade -Qué será?... yo no sé... lo he buscado
en unos diccionarios empolvados y antiguos
y en otros libros que no me han dado el significado
de esta dulce palabra de perfiles ambiguos.

Dicen que azules son las montañas como ella,
que en ella se oscurecen los amores lejanos,
y un noble y buen amigo mío (y de las estrellas)
la nombra en un temblor de trenzas y de manos.

Y hoy en Eca de Queiroz sin mirar la adivino,
su secreto se evade, su dulzura me obsede
como una mariposa de cuerpo extraño y fino
siempre lejos -tan lejos!- de mis tranquilas redes.

Saudade... Oiga, vecino, sabe el significado
de esta palabra blanca que como un pez se evade?
No... Y me tiembla en la boca su temblor delicado.
Saudade...
Pablo Neruda.


Hoy es tu cumpleaños, Pablo.
Celebro que en un día como el de hoy, viniste desde tu Parral natal envuelto en la geografía chilena. Temuco, Chillán, Lota, Valparaíso, Chiloé... Santiago.
Poeta y militante de la vida. Qué otra cosa puede ser un poeta, acaso?
Compañero de viaje y utopías. Por tu culpa caminé las calles de Castro, Ancud. Por vos me senté en la caleta de Angel Mö a contemplar las barcas que volvían llenitas de pescados y mariscos... mientras aquella señora de pelo blanco nos llenaba los tazones con vino de tu tierra. Y caminé por las orillas del Pacífico invocando tu nombre. No fue en vano. Vos lo sabés.
Hoy no encuentro mejor forma de celebrar tu cumpleaños que venirme con mi tío Vinicius de Moraes y Toquinho, el “branco mais preto do Brazil” como bien me enseñó Zeca en aquellas interminables noches de Florianópolis en “Casa do Suco”, donde no era jugo lo que precisamente tomábamos... y a medida que el mismo Zeca me enseñaba que cosa era la saudade, iban pasando canciones de Vinicius, Caetano, Gilberto Gil y la poesía de Drummond, Thiago de Melo y tus Alturas del Machu Pichu...
Vinicius ya destapó la primer botella de whisky... así que festejemos entonces, querido Pablo.
Porque hace ya un buen rato que vos formás parte de mis paganas oraciones.
Ahora y siempre.



Soneto dedicado a Neruda

Cuantos Caminos no recorrimos juntos
Neruda, mi hermano, mi compañero
Y este encuentro de súbito, entre muchos
No fue acaso el más bello y verdadero?

Canto mayor canto menor
Dos cantos se hacen oir sobre el crucero
En su receso las cóleras y el llanto
Del hombre chileno y del hombre Brasileiro.

En su amor, el amor que hoy encontramos
Por eso al tocarse nuestras ramas
Te celebro aún más allá cantor general.

Porque como yo bicho pesado vuelas
Pero más alto y mejor desde el cielo entonas
Tu furioso canto material.

Vinicius de Moraes.

3 comentarios:

Elizabeth dijo...

Me encanta ouvir a gente falando portugues.Foi um prazer!!!
Cuando estuve en la casa de Neruda en el año 2005, sentí algo muy especial, ya habrás visto los posteos que hice en relación a ese viaje.
Gracias Gato por recordarme su cumpleaños.

Anónimo dijo...

Cuantos artistas maravillosos en este post, gracias, gracias, por traerlos a ellos y todo lo que esos recuerdos disparan...

Bea dijo...

Claro que (como bien lo dice Neruda), "me tiembla en la boca su sabor delicado".
Yo, modestamente creo que SAUDADE é o amor que fica.

Te mando un mail, donde entenderás el porqué.
Muchos cariños pata ti y tu familia.