sábado, 29 de agosto de 2009

Acerca de Héctor Rosales, el poema y aquella generación...


El poeta y amigo Héctor Rosales tiene la mala y sana costumbre de dejar la puerta de su casa abierta. Y cuando esto ocurre, inevitablemente entran y salen miles y miles de almitas pájaros. Yo estuve ahí, yo los vi. Desde el Gordo Faget hasta la entrañable Marosa Di Giorgio habitan de a ratos detrás de aquellos ventanales. Es así que el otro día y sin avisar fui a visitarlo. No lo encontré. Héctor andaba caminando por la orilla de no se que nostalgia mientras el mar le devolvía el rugido de la multitud gritando aquellos goles del Negro Spencer o de Celio Taveira Filho mientras imaginaba el relato de Don Carlos Solé...

Que épocas aquellas en las que el fútbol uruguayo no solo era capaz de vencer al Real Madrid en el mismísimo Chanmartín o de generar aquel milagro que tanto daño nos hizo después... el Maracanazo... aquel mismo fútbol era también capaz de encumbrar a jugadores con nombres tan artísticos como Pedro Virgilio Rocha ó Schubert Gambetta, en cambio hoy... todos se llaman Maxi...

“Yo nostalgio,
tú nostalgias
y cómo me revienta que él nostalgie...”
nos dice el querido "Viejo" y será por eso que más acá, el Hermano Macunaíma saca una y otra vez su bufanda de aviador multicolor lanzándola como un dardo esperanzador que apunta al mañana, mientras nosotros seguimos en medio de tanta batallita al pedo...

El bueno de Héctor sabiendo que yo iría a su casa había dejado sobre la mesa del comedor una carpeta azul de donde sobresalían desordenadas varias hojas manuscritas.
Me senté a leerlas una a una pero al encontrarme con aquella donde estaba el poema “Insecticida” por causa o destino la dejé para el final.

No se que sucedió en aquel momento, no podría describir exactamente con palabras lo que me hizo sentir aquel poema. Pero en ese mismo instante y créanmelo porque así fue... los acordes de la guitarra de Fernando Cabrera y aquella milonga hecha tangués lo inundaron todo y la voz de Héctor y aquel sol que entraba por el ventanal y yo en medio de todo aquello me sentí tan pero tan continentado que dejé de ser isla por un momento...

La “generación del silencio” nos llamaron... pero qué sabrán ellos...




Insecticida
Voz: Héctor Rosales
Guitarra: Fernando Cabrera

Ocurrimos cuando vencía el dilema,
el acoso del desorden, las malas noticias.

Nos bautizaron
con un signo de interrogación
en la frente baldía.

En algunos casos
amor encendió los signos
por unos u otros extremos
y el humo que se formó en el espiral
ahuyentó por un tiempo
a los insectos.

El 28 de mayo de 1993 tuvo lugar en Barcelona un recital conjunto del compositor e intérprete uruguayo Fernando Cabrera y Héctor Rosales. Como consecuencia, Cabrera y Rosales prepararon un trabajo que, bajo el título de Barcelona al sur, recopilaba poemas y canciones que se incluyeron en el programa de aquel acto. La cassette aparecería en julio del mismo año. Dicho material fue remasterizado y publicado en formato CD por Montebarna Ediciones en el 2005. (Extraído de www.hrosales.com)

Se pueden escuchar otras grabaciones de dicho trabajo en: “Voz & después”


Héctor Rosales es un poeta y escritor nacido en Montevideo, Uruguay en 1958. A mediados de enero 1979 se radica en Barcelona (España). En ese año inicia sus contactos con revistas literarias, edita su primer libro, funda con otros poetas el Grupo Ahora (equipo literario que extiende su actividad hasta 1986), participa en programas de radio, asesoramiento editorial, diseño gráfico y distintas iniciativas de difusión cultural que llegan hasta el presente.
Incluido en antologías, diccionarios, libros colectivos y otras publicaciones, algunos de sus textos se han traducido al francés, portugués, catalán, gallego, polaco, italiano, inglés y alemán.
Mediante crónicas, poesía, reseñas, selección y presentación de textos y autores ha colaborado en suplementos culturales, periódicos y más de un centenar de revistas de arte y literatura de distintos países.
Algunos de sus libros, poemas y textos en prosa se han estudiado en varios talleres de escritura, institutos o universidades de España, Francia, Portugal, Suecia, Argentina, Uruguay y Estados Unidos.

Obra publicada:

Poesía:

• Visiones y agonías (Barcelona, 1979, 2ª ed. corregida y aumentada, New Jersey, 2000).
• Espejos de la noche (Madrid, 1981).
• Carpeta 1 (Barcelona, 1982).
• Dende eiquí / plaquette (Pontevedra, 1983).
• Espectros (Gijón, 1983).
• Desvuelo (1ª ed. Montevideo-Barcelona, 1984, 2ª ed. corregida y aumentada: Barcelona, 1997, 3ª ed. 1999, 4ª ed. e-book, San José de Costa Rica, 2001, 5ª ed. en formato pdf, México, 2004).
• Cuatro textos / pliego (Barcelona, 1985).
• Cinco poemas (en suplemento revista “Calandrajas” nº 15, Toledo, 1987).
• Rieles / plaquette (Barcelona, 1989).
• Alrededor el asedio (Montevideo, tres eds., 1989/92/93, Primer Premio 1992, Ministerio de Educación y Cultura, Uruguay).
• Cuatro postales de Suecia / pliego (cuatro eds., Barcelona 1992/93/94, México, ed. pdf, 2005).
• Habitantes del grito incompleto (Montevideo, 1992).
• El manantial invertido / plaquette (cinco eds., Barcelona 1994/96/2003, esta última aumentada, y Santiago de Compostela, 1995, con versión gallega e integrando la revista universitaria Ólisbos, nº 17).
• Mientras la lluvia no borre las huellas (Barcelona, 2002).

Antologías

• Voces en la piedra iluminada / Diez poetas uruguayos (Toledo, 1988).
• Chapper, las espinas del verso (Montevideo, 2001). (fuente: Wikipedia)

Al cumplirse 30 años de la aparición de “Visiones y agonías”, Palabra Virtual (Méjico) acaba de editar una nueva edición. Se puede bajar gratuitamente en el siguiente link:
http://www.palabravirtual.com/pdf/visiones.pdf

*Fotos y audio cedidas por Héctor Rosales
Página web oficial: http://www.hrosales.com/

1 comentario:

FLACA dijo...

¿De veras lo conocés?... Tu camino y el mío están signados para cruzarnos. Te cuento: una vez, buscando no sé qué en internet respecto al guitarrista que vive conmigo,encontré una cosa escrita por Rosales hablando de un profesor de Historia que tuvo en Uruguay - el querido Hugo Licandro-, amigo y esposo de una amiga. Escribió eso que yo encontré en internet porque leyendo el diario por internet, el anuncio de un homenaje a Licandro en el Cabildo, donde se presentaba su libro póstumo y tocaba la guitarra el de platinada cabellera.
Tengo guardado lo que escribió Rosales, porque me tocó el alma. Lo que dice él es lo que todo profesor desearía que un alumno dejera de él muchos años después. Si yo, profesora, lograra eso entonces daría por cumplida mi misión profesional.
Cuántas casualidades, Gato.