sábado, 25 de febrero de 2012

Santa María del Buen Aire...



Mañana hará una semana de nuestro arribo a Buenos Aires.
Hacía muchos años que no la caminaba.
Y está cambiada, muy cambiada.
Para bien y para mal.
Esta Buenos Aires, ahora sí… es también latinoamérica.
En la zona del albergue donde nos hospedamos, por las noches se pueden ver cientos de “cartoneros”(*) tratando de ganarse un peso decentemente.
Familias enteras revolviendo y comiendo de la basura.
Aclaro que el albergue está a dos cuadras de Corrientes y 9 de Julio, en pleno Microcentro.
La Av. Rivadavia corta la ciudad en norte-sur y no solo geográficamente hablando. También lo hace económica y socialmente.
Parece joda, pero una vez más se cumple la premisa de “norte rico” y “sur pobre” o lo que es lo mismo que decir… pobre sur!
Si uno va hacia los barrios del norte, la cosa cambia un poco.
Aparecen nuevos nombres de barrios… al Palermo que yo conocía ahora lo dividieron en dos.
Palermo Soho y Palermo Hollywood… tomá!
Volviendo al sur de la Av. Rivadavia, uno de los barrios que más ha cambiado es San Telmo. De aquella feria de antigüedades que apenas tenía dos cuadras, ahora se multiplicó varias veces. Llenito de casas de antigüedades, de resto-bar (¿?)… se respira “tangou argentinou” por todos lados.
Todo se llama tango… Tangohotel, tangobar, tangopub…
El tango es argentino, che…
Y sí, acá todo es argentino… ahora resulta que el chimichurri es argentino, el fainá es argentino, el tango es “exclusivamente” argentino… por más que 2 de cada 4 tangos famosos, hayan sido escritos o musicalizados por uruguayos.
Por no hablar de “La Cumparsita”, el himno de todos los tangos…
No importa. Hay que vender “tangou” para los turistas como sea… Me pregunto si el apropiarse del tango es culpa de los argentinos o debilidad de los uruguayos. Tal vez ni una cosa ni la otra, o tal vez las dos…
Lo que más me agradó de estos días en Buenos Aires, fue confirmar una vez más que hay gente entrañable por todos lados. Sigo pensando que una ciudad es ella y su gente. Y Buenos Aires lo es.
Una ciudad donde se respira tango (sin “u” al final), una ciudad donde aún podés hablar con un vendedor de diarios. Donde aún dentro del ritmo vertiginoso en el que vive y late esta ciudad, hay gente que te devuelve una sonrisa.
Los porteños nos quieren y mucho a los uruguayos.
Te lo hacen saber permanentemente.
Y eso se agradece.
Mientras tanto, seguimos buscando un lugar donde alquilar.
Está difícil, pero confío plenamente en mis instintos, aunque suene altanero… confío.
Y algo me dice que la Santa María de los Buenos Aires, será por un buen tiempo, mi otro lugar en el mundo.

(*)cartonero: Así se les llama a quienes salen por las calles a buscar todo tipo de cartones, para luego venderlos por kilo.

6 comentarios:

Rochies dijo...

ojalá se trate de un nuevo lugar en el mundo.

Sí si ustedes son más queridos por nosotros que "a rovescio".

Guillermo Bernengo dijo...

Cuando la música se transforma en pasión, como el fútbol nos vamos al caramba. Lo que pasa es que el Tango no es ni propiedad de dos países, es de dos orillas.
Chile y Perú se pelean por la propiedad del Pisco.
Un disparate, la cultura es humana, es biológica, al igual que la botánica y la zoología no saben que carajos es una frontera y un grupo con lideres que hacen historia y cagadas. La cultura es de las cosas que nos van quedando (no se sabe por cuanto)
Las fronteras son fabricadas por las personas que crearon la palabra extranjero y xenofobia.(gente jodida)
Ahora , pa la pasión , si quieren tener una lista medio fanática de tangos uruguayos tal ves unos cuantos se sorprendan . la encontré recién http://uruguaytango.blogspot.com/

(como se me pasaron los días que estuviste en Montevideo, y yo estaba en otra , que boludo, lo parió)

Anónimo dijo...

Un abrazo Gato

dafne1968@gmail.com dijo...

Me alegra, querido amigo, que andes respirando aires de tango. Al menos yo también la siento asi a esa ciudad loca, loca: en cada esquina se escucha a Piazzolla con el corazôn. Buenos Aires es nuestra casa también, asi de amenazadora, protestona y hostil, también tiene alma de tango y hay patios y santa ritas, todavia.
Beso grande! D.

Guada dijo...

Hablando de Buenos Aires, recuerdo una exposición que fui en La Recoleta en el año 2002 sobre los desaparecidos, fue una de las experiencias más desoladoras de mi vida. En una de las salas se había ambientado con luces y sonidos algo así como unos pasillos y habitaciones pequeñas. Había oscuridad, gritos desgarradores, golpes en las paredes, disparos y todo lo estremecedor que se te pase por la cabeza. Creo que demoré en atravesar ese tipo de laberinto oscuro unos dos o tres minutos y cuando por fin vi la luz me encontraba en un patio con un silencio sepulcral empapelado con caras de seres humanos seguramente torturados, asesinados y desaparecidos que parecían mirarme y decirme "por esto pasamos nosotros". Salí con ganas de abrazar a todas las madres de Plaza de Mayo que se encontraban tutelando la exposición. Pasaron diez años y todavía lo tengo en la mente cada vez que recuerdo Bs As y creo que te lo conté alguna vez. Adoro la ciudad, además tengo primos porteños, estoy encantada con el pediatra de mi hija aquí en Tenerife porque es tb de allí...jaja!! Cuando un uruguayo y un argentino se encuentran en territorio neutral, nos entendemos de maravilla y las similitudes se potencian. Compartimos más códigos de lo que parece.
Soy muy mala para recordar nombres de los sitios donde voy pero recuerdo un bar que estaba ambientado con cosas de boxeo, fotos, afiches, etc. donde tome el vino moscatel más rico hasta ahora. Seguro que algún amigo de allí sabrá de cual hablo. La verdad es que ese mes que estuve en Buenos Aires fue inolvidable.

Clari dijo...

sin duda es una ciudad muy bella, llena de paisajes y de actividades para hacer. yo veo que los turistas alquilan muchos departamentos en buenos aires para quedarse por un tiempo. parece gustar mucho la vida alli